Celebran magno desfile de locos

Magna celebración a San Antonio de Padua con tradicional desfile de locos. Foto: José Ortiz Moya

El Sol del Bajío
16 de junio de 2008
Alma Gabriela Pérez

San Miguel de Allende, Gto.- El desfile de locos contó con numerosos carros alegóricos que traían su respectivo equipo de sonido y diferentes temas que los participantes desarrollaron, pues lo mismo se disfrazaron de cavernícolas que de luchadores de la triple A, la imaginación de los sanmiguelenses se desbordó en esta ocasión.

Hubo gran concentración de espectadores en las diferentes calles por donde pasó el desfile. Según cálculos de la autoridad municipal, participaron más de 8 mil locos y más de 40 mil asistentes.

Muchos de los participantes acuden por diversión o por manda, es decir, solicitaron algún tipo de favor al santo patrono y como recompensa de haber recibido la gracia solicitada, la gente baila durante el desfile.

SAN ANTONIO DE FIESTA

La parroquia de San Antonio de Padua, ubicada en la colonia del mismo nombre, es donde se venera la imagen de este santo, quien vivió de 1191 a 1231 en Italia. Según las crónicas, en su juventud se distingue por ser apuesto y atractivo para numerosas jóvenes, a las que él no toma en cuenta.

Cerca de sus 18 años, este santo deja riquezas y comodidades e ingresa con los clérigos regulares de San Agustín. En 1210 se recibe como sacerdote e incluso, evangeliza en Marruecos (África). Se le conoce como una persona obediente en extremo, dedicado a la penitencia.

San Antonio de Padua se le reconoce como santo intercesor para encontrar objetos perdidos. Su iconografía es con hábito, con el niño Jesús en brazos y en su mano porta una azucena o un lirio.

Cada martes, se le dedica una solemne celebración eucarística impartiéndose la bendición con una reliquia del santo y se reparte pan bendito a loa asistentes.

En dicha parroquia, todavía se puede ver un exvoto (promesa) de 1956, donde se puede leer un milagro hecho por este santo: Doy gracias infinitas a SAN ANTONIO DE PADUA.

Añade, porque en el año de 1956 perdí una yegua y al invocar este santo, el animal regresó sólo a casa. ATT J. SANTOS RENDÓN A.".

La celebración de San Antonio se remite al siglo XVIII en San Miguel de Allende y a la fecha, la tradición de su veneración continúa.

Durante esta festividad, se llevó a cabo un trecenario, con la celebración de diferentes eventos religiosos, culturales, deportivos y recreativos. El sábado pasado se llevaron a cabo las confirmaciones de varios niños con misa oficiada por el obispo de Celaya, Lázaro Pérez Jiménez.

Durante todo el día de ayer, hubo locos por donde quiera, la fiesta continuó todo el día en el atrio de la parroquia con música de banda y sonidos.

Durante la noche, la solemne concelebración fue oficiada nuevamente por el obispo Lázaro Pérez y se culminó con una gran presentación de fuegos pirotécnicos.