San Miguel de Allende, Gto., 24 de noviembre del 2006
Lic. Luis Alberto Villarreal García
Senador de la República
Lic. Jesús Correa Ramírez
Presidente Municipal de San Miguel
de Allende
H. Ayuntamiento de San Miguel de Allende.
P r e s e n t e
Los abajo firmantes, habitantes y ciudadanos interesados en la conservación del patrimonio cultural de nuestro país y, sobre todo, de nuestra ciudad, expresamos a usted nuestra gran preocupación e indignación por el constante deterioro y embate destructivo que está sufriendo el patrimonio cultural de San Miguel de Allende, tanto en sus tradiciones como en sus monumentos.
Nuevamente el gobierno municipal ha emprendido diversas acciones de ‘revitalización” y desarrollo urbano condescendiendo –como siempre- con intereses económicos que impulsan estrategias de desarrollo urbano y económico, sin preocuparse por la destrucción de la fisonomía arquitectónica de la ciudad, en aras de convertirla en una población más moderna y lucrativa.
Son diversos los casos y problemática que se presentan, pero queremos sobre todo dar constancia de los siguientes, que son de gran preocupación para nosotros:
1.- La realización cada año de la “sanmiguelada”, que como usted bien sabe, este año atrajo a más de 50,000 personas (jóvenes en su mayoría), y que ha pasado de ser una fiesta taurina a un fin de semana de alcoholización desmedida, con la consiguiente agresión no sólo a la ciudad y sus monumentos, sino también a sus habitantes, quienes nos vemos secuestrados en los hogares ante la imposibilidad de transitar sin ser agredidos físicamente dentro de una ciudad sin ley, pues las autoridades municipales se ven totalmente rebasadas e impotentes en todas sus competencias: seguridad pública, fiscalización y servicios públicos. Basta ya de seguir degradando a nuestra ciudad. Se pueden buscar alternativas que no lesionen tan gravemente a la sociedad y al patrimonio, y que, por el contrario, beneficie turísticamente a la ciudad a lo largo del año y no solo un fin de semana.
2.- Desde hace varios meses se vienen llevando a cabo trabajos urbanos y arquitectónicos que están modificación gravemente la fisonomía de la ciudad, como sucedió meses atrás con el Jardín Principal y la plazuela de San Francisco, y ahora en diversas banquetas de la zona monumental. Nos preocupa mucho el destino de la piedra “sanmiguelita”, que ha sido retirada y que debería reutilizarse en el mantenimiento de las actuales banquetas, evitando con ello la introducción de materiales ajenos a la tradición constructiva sanmiguelense como el adoquín y el pórfido, mismos que colocan actualmente en cualquier lugar de nuestro país sin importar historia y tradiciones.
3.- Es también preocupante la cantidad de modificaciones al uso del suelo, mediante las cuales se han aprobado en los últimos años innumerables proyectos habitacionales que poco tienen que ver con el desarrollo urbano propio de San Miguel, sino que derivan de la ambición de los propietarios de bienes raíces, quienes en beneficio propio, y no de la sociedad, están lesionando sin escrúpulos e irracionalmente el entorno urbano y ambiental que ha distinguido a nuestra ciudad, aumentando considerablemente la densidad de población así como los requerimientos viales y de servicios.
Por todo lo anterior solicitamos a ustedes respetuosamente:
a) El ejercicio riguroso y objetivo de los diversos normativos de ley que rigen la conservación y salvaguardia del patrimonio cultural y natural, tangible e intangible, desde el artículo 115 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos hasta la Ley Federal sobre Monumentos y Zonas Arqueológicos, Artísticos e Históricos para así evitar la realización de trabajos que alteran definitivamente el valor estético e histórico de San Miguel de Allende, bajo el pretexto de revitalizarlo.
b) El respeto irrestricto a los valores arquitectónicos, urbanos y ecológicos de la ciudad, mediante responsables planes parciales de desarrollo integral que regulen los diversos proyectos turísticos, habitacionales y comerciales que están en vías de construcción, y que se llevan a cabo sin una correcta regulación del uso del suelo, ni los correspondientes estudios de impacto urbano, vial, ambiental y de servicios, lo que está propiciando un descontrolado crecimiento urbano, muy por encima de las capacidades físicas reales del área urbana, transformando los usos lógicos de sus espacios mediante la saturación inmobiliaria y comercial.
c) La defensa, difusión e impulso permanente de las fiestas, tradiciones y manifestaciones culturales que se desarrollan a lo largo del año, evitando se desvirtúe y altere su significado social y cultural, como sucede año con año durante la “sanmiguelada”.
d) Solicitamos a las autoridades municipales el establecer un diálogo permanente con los diversos grupos sociales que externan su opinión razonada sobre la multiplicidad problemática que aqueja a la ciudad, (Comisión Local para la Preservación del Patrimonio Cultural, Colegio de Arquitectos, Amigos de San Miguel, Asociación de Tradicionalistas ), y que buscan alternativas y soluciones en beneficio común, para así evitar la desaparición de todos aquellos valores que le han conferido a San Miguel de Allende un carácter singular en el Bajío mexicano, en el país y el mundo.
Agradeceremos su atención a la presente y esperamos su compromiso y voluntad política para lograr el objetivo común de todos (autoridades y sociedad): la conservación, rescate y salvaguarda de San Miguel de Allende, patrimonio cultural y natural de todos.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario