Notimex / La Jornada On Line
El coordinador de la campaña de Clima de Greenpeace, Jorge Escandón, dijo que en México hay 23 millones de personas en situaciones de vulnerabilidad.
México, DF. En México hay 23 millones de personas en situaciones de vulnerabilidad, por lo que urge un verdadero ordenamiento territorial para evitar tragedias como la de Tabasco, señaló el coordinador de la campaña de Clima de Greenpeace, Jorge Escandón.
Indicó que esa cifra equivale a casi la cuarta parte de los mexicanos, de manera que es urgente tomar medidas al respecto, y afirmó que según la Organización Meteorológica Mundial “la prevención tiene un costo seis veces menor al de la respuesta a una emergencia”.
Enfatizó que “necesitamos programas de mitigación y adaptación para las zonas vulnerables al cambio climático", como lo es Tabasco.
Consideró preocupante el accidente en una de las plataformas de Pemex, que 80 por ciento de Tabasco está bajo el agua por el desbordamiento de ríos, y que todos los días haya desastres de diverso grado que reflejan impactos del cambio climático.
Además, esta situación muestra que se carece de una política de respuesta adecuada y de una estrategia de prevención y mitigación por parte de las autoridades federales, estatales y municipales, abundó.
Subrayó que lo que se necesita son programas de mitigación y adaptación para las zonas vulnerables al cambio climático.
Desde 1997, en la Primera Comunicación Nacional ante la Convención Marco de las Naciones Unidas para el Cambio Climático, se advirtió que el Complejo Deltaico Tabasqueño es altamente vulnerable, debido a que las costas del Golfo y del mar Caribe son bajas y arenosas, es decir, que tienen una alta posibilidad de anegación.
“En un contexto de cambio climático mitigar significa disminuir emisiones de gases de efecto invernadero y adaptar significa que considerando el incremento de fenómenos climáticos extremos, se tomen medidas para disminuir el peligro, planteó.
Es decir que los gobernantes tendrían que estar previniendo más que reaccionando ante este tipo de eventos.
Alertó que tanto los factores de exposición como los de vulnerabilidad frente a eventos hidrometereológicos extremos han aumentado.
El ambientalista advirtió que en los años más recientes ha crecido el número de depresiones tropicales en el Caribe y el Golfo de México, además de que aumentó la fuerza de los huracanes.
Recomendó a las autoridades del Sistema Nacional de Protección Civil y a la Comisión Intersecretarial de Cambio Climático reubicar a las comunidades más vulnerables ante fenómenos climáticos y más políticas preventivas en los 263 municipios costeros del país.
También es necesario que los programas estatales de desarrollo incluyan estrategias de prevención ante el creciente riesgo por sequías y huracanes, sostuvo.
Escandón dijo que la planeación debe incorporar el ordenamiento y conservación de acuíferos para proporcionar agua en caso de emergencia y la restauración de los cuerpos de agua que permitan mantener la capacidad de almacenamiento ante lluvias extremas y extraordinarias.
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